Longevidad y medio ambiente: el impacto de la contaminación y cómo protegernos

Longevidad y medio ambiente: el impacto de la contaminación y cómo protegernos

La exposición prolongada de los seres humanos a la contaminación del aire aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias, por lo tanto, acorta la esperanza de vida. ¿Podemos protegernos de alguna manera frente a esta contaminación para vivir más?

Índice

¿Cómo afecta la contaminación a nuestra salud?

La contaminación es la introducción de sustancias o agentes contaminantes en el medio ambiente, causando efectos adversos. La contaminación puede afectar el aire, el agua, el suelo y otros componentes del entorno, teniendo consecuencias perjudiciales para la salud.

No siempre podemos ver las consecuencias de la contaminación que nos rodea, pero nos está costando años de vida. De hecho, causa la muerte de 4,2 millones de personas cada año.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que más de 70 % de las tasas de mortalidad global se debe a enfermedades no transmisibles como las cardiovasculares, respiratorias o el cáncer.

Los principales factores de riesgo para la salud incluyen el tabaquismo, las dietas poco saludables y el sobrepeso, la hipertensión, la diabetes, el colesterol alto y la contaminación del aire.

De hecho, la contaminación del aire ambiente es uno de los principales riesgos para la salud mundial, ya que provoca un exceso significativo de mortalidad y pérdida de esperanza de vida, especialmente a través de enfermedades cardiovasculares. Tanto, que los efectos de la contaminación en nuestra esperanza de vida son similares a los del tabaco. Así, la pérdida de esperanza de vida por contaminación del aire supera con creces el de la violencia (todas las formas juntas) y llega a acortar la esperanza de vida una media de 2,9 años según un estudio.

Esto es debido a que la contaminación atmosférica está causada por pequeñas partículas que entran en nuestro organismo provocando daños en los vasos sanguíneos, afectando a la tensión arterial y aumentando el riesgo de ataques cardiacos, insuficiencia cardiaca y accidentes cerebrovasculares.

Pero no solo aumenta el riesgo de enfermedades cardiacas, también de infecciones respiratorias, disminución de la función pulmonar, envejecimiento de los pulmones y un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) o cáncer de pulmón.

Y ciertos contaminantes, como metales pesados y algunos productos químicos industriales, pueden tener efectos negativos en el sistema nervioso central causando problemas neurológicos y del desarrollo en niños y personas mayores.

La exposición a ciertos disruptores endocrinos y sustancias químicas tóxicas puede tener efectos adversos en la fertilidad y el desarrollo fetal.

Según un nuevo informe sobre el Índice de vida y calidad del aire del Instituto de Política Energética de la Universidad de Chicago (EPIC), la contaminación del aire está restando 2,2 años a la esperanza de vida promedio mundial. En algunas de las regiones más contaminadas del mundo, se espera que los residentes pierdan un promedio de cinco años de vida si persisten los altos niveles actuales de contaminación.

Más de 70.000 estudios avalan que la contaminación atmosférica mata, por lo que el problema no es si la contaminación es peligrosa o no, sino cómo podemos, viviendo en ciudades, hacerle frente para que nos afecte lo menos posible.

Y este problema de salud afecta en especial a las personas de mayor edad, por lo que el 75% de las muertes atribuidas a la contaminación se dan en personas mayores de 60 años. También los niños, los enfermos crónicos y las embarazadas se ven afectadas por este problema.

La eliminación de las emisiones antropogénicas de contaminación atmosférica puede evitar entre un 25 y un 80% esta pérdida de esperanza de vida dependiendo del papel local de las emisiones naturales (por ejemplo, el polvo eólico), pero con un potencial sustancial para reducir la mortalidad mediante la mejora de la salud. ¿Cómo lograrlo?

¿Cómo reducir el impacto de la contaminación en la salud?

Reducir el impacto de la contaminación en la salud implica tomar medidas a nivel individual, comunitario y gubernamental. De todas estas medidas, está claro que las que más impacto tienen son las que se puedan adoptar a nivel gubernamental y mundial. Sin embargo, como no podemos fiar nuestra salud a que los gobiernos se decidan a tomar las decisiones en materia de contaminación necesarias, debemos procurar hacer todo aquello que esté en nuestra mano para minimizar el impacto de la contaminación en nuestra salud.

1- Evita hacer ejercicio físico en el exterior cuando los niveles de contaminación sean muy elevados y, si se hace, usar mascarilla. Puedes consultar los niveles de contaminación del aire en la web de tu ayuntamiento.

2- Ventila a diario tu casa a primera hora de la mañana, cuando la contaminación es menor.

3- Usa el transporte público y medios de transporte que no contaminen como la bicicleta o coches eléctricos.

4- Consume productos locales y de cercanía y que sean ecológicos.

5- Utiliza fuentes de energía renovable y adopta prácticas más eficientes en el hogar para disminuir las emisiones de contaminantes atmosféricos.

6- Recicla toda la basura y objetos que deseches y procura reducir el consumo y reutilizar todo aquello que pueda tener una segunda vida.

7- Siempre que puedas, ve a espacios verdes y a pasar tiempo en medio de la naturaleza para respirar un aire menos contaminado.

8- Reduce el uso de pesticidas, herbicidas y otros productos químicos tóxicos en el hogar para prevenir la contaminación del suelo y del agua.

9- Reduce el consumo de plásticos usando bolsas reciclables al ir de compras, evitando los envases de plástico y usando los de cartón o vidrio, comprando a granel, etc.

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Ideas clave

  • La contaminación es la introducción de sustancias o agentes contaminantes en el medio ambiente, causando efectos adversos. La contaminación puede afectar el aire, el agua, el suelo y otros componentes del entorno, teniendo consecuencias perjudiciales para la salud.
  • Causa la muerte de 4,2 millones de personas cada año.
  • La contaminación del aire ambiente es uno de los principales riesgos para la salud mundial, ya que provoca un exceso significativo de mortalidad y pérdida de esperanza de vida, especialmente a través de enfermedades cardiovasculares. Tanto, que los efectos de la contaminación en nuestra esperanza de vida son similares a los del tabaco. Así, la pérdida de esperanza de vida por contaminación del aire supera con creces el de la violencia (todas las formas juntas) y llega a acortar la esperanza de vida una media de 2,9 años.
  • Según un nuevo informe sobre el Índice de vida y calidad del aire del Instituto de Política Energética de la Universidad de Chicago (EPIC), la contaminación del aire está restando 2,2 años a la esperanza de vida promedio mundial.
  • Más de 70.000 estudios avalan que la contaminación atmosférica mata, por lo que el problema no es si la contaminación es peligrosa o no, sino cómo podemos, viviendo en ciudades, hacerle frente para que nos afecte lo menos posible.
  • A nivel personal debemos no hacer ejercicio físico al aire libre cuando la contaminación sea muy elevada y, si no es posible, usar mascarilla; ventilar a primera hora de la mañana, usar más el transporte público o la bici, usar fuentes de energía renovables, reciclar, ir a la naturaleza siempre que podamos, reducir el uso de pesticidas y químicos en el hogar, reducir el consumo de plásticos.

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Fuente:

  • Jos Lelieveld, Andrea Pozzer, Ulrich Pöschl, Mohammed Fnais, Andy Haines, Thomas Münzel, Loss of life expectancy from air pollution compared to other risk factors: a worldwide perspective, Cardiovascular Research, Volume 116, Issue 11, 1 September 2020, Pages 1910–1917, https://doi.org/10.1093/cvr/cvaa025

Redacción: Irene García

Supervisión editorial: Carlos Gutiérrez

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