Propiedades y contraindicaciones de la tila

Propiedades y contraindicaciones de la tila

La tila es una infusión usada desde hace siglos gracias a sus propiedades calmantes que nos ayudan a relajarnos en momentos de ansiedad y a conciliar mejor el sueño. Descubre todas sus propiedades y cómo tomarla.

Índice

¿Qué es la tila?

La tila o té de tilo es una infusión que se extrae de la flor del tilo, un árbol del género tilia originario de Europa, Asia y el norte de América. Existen varios tipos de esta especie y el más potente es la tilia cordata, conocida también como tilo de hoja pequeña o tilo silvestre.

Esta planta medicinal tiene muchas propiedades beneficiosas para la salud gracias a su contenido en diversas sustancias como limoneno, nerol, eugenol, quecertina, terpineol, alfa-pineno, ácido cafeico, farnesol, glucósidos, taninos, cumarinas, carotenos, mucílagos, suercitrósidos y vitamina C.

Por eso, se le atribuyen propiedades calmantes, relajantes, antiespasmódicas, digestivas, diuréticas, anticoagulantes, somníferas y ansiolíticas.

Su uso más extendido es como infusión, pero también se encuentra como extracto en suplementos dietéticos, las flores dan mucho néctar con el que se puede hacer miel, se pueden usar las flores y las hojas secas, etc.

Beneficios de la tila para la salud

1- Reduce la ansiedad y el estrés

La tila es uno de los calmantes más antiguos y usados que existen. Tomada en infusión, promueve la relajación y calma los estados de ansiedad. ¿Cuántas veces te dijo tu madre que te tomaras una tila cuando estabas preocupado o nervioso por los exámenes?

Aunque todas las especies de tilo son calmantes, un estudio en ratones afirma que la Tilia tomentosa es la más eficaz ya que imita la actividad del ácido gaba-aminobutírico (GABA), una sustancia química del cerebro que inhibe los nervios en el sistema nervioso y calma la mente.

Por lo tanto, es útil para reducir la ansiedad y el estrés, así como la depresión.

2- Combatir la inflamación

La inflamación crónica contribuye al desarrollo de muchas enfermedades, incluida la diabetes tipo 2 y el cáncer.

Los antioxidantes son compuestos que ayudan a combatir la inflamación, lo que puede reducir el riesgo de desarrollar estas enfermedades. Los flavonoides son unos antioxidantes que se encuentran en las flores del tilo, mientras que en los capullos o brotes se encuentran otros como la tilirosida, la quercetina y el kaempferol. La tilirosida es uno de los antioxidantes más potentes para eliminar los radicales libres, cuya acumulación causa estrés oxidativo. Kaempherol también puede combatir la inflamación.

3- Puede reducir el dolor leve

El dolor crónico afecta a millones de personas en todo el mundo. Para ellos, existe una buena solución natural: la tila.

Un estudio encontró que administrar 100 mg de tilirosida por cada kilo de peso corporal a ratones con las patas inflamadas redujo la inflamación y el dolor en casi un 27% y un 31%, respectivamente.

Otro estudio realizado en mujeres con artritis reumatoide descubrió que la suplementación con 500 mg de la quercetina que se encuentra en el té de tilo redujo el dolor y la inflamación que sufrían.

Sin embargo, 500 mg de quercetina es mucho y más de 80 mg se considera una ingesta alta.

Además, la cantidad de quercetina u otros flavonoides en el té de tilo varía según la marca y la especie de tilo, por lo que es imposible saber la cantidad que estamos tomando en infusiones. Habría que recurrir a los suplementos.

4- Ser diurético

Como muchos otros tés, la corteza interna del tilo tiene efectos diuréticos. Se cree que estos efectos se deben a su contenido en quercetina, kaempferol y ácido p-cumárico, aunque hace falta más investigación.

El ácido p-cumárico es un diaforético conocido, lo que significa que puede inducir la sudoración. Cuando sudamos, eliminamos toxinas del organismo, lo que nos ayuda a limpiar el cuerpo.

5- Ayudar a tratar resfriados

La corteza de tilo tiene también efectos diaforéticos (aumenta el sudor para reducir la fiebre). Por eso, es un remedio popular para tratar la tos productiva y la fiebre en resfriados. En Alemania, por ejemplo, se usa habitualmente en mayores de 12 años.

6- Mejorar las digestiones

Como muchas otras infusiones calientes, ayuda a aliviar el tracto digestivo, mejorando las digestiones y evitando problemas estomacales.

Además, la tilirosida tiene propiedades antibacterianas, por lo que puede ayudar a tratar procesos bacterianos como la gastroenteritis.

7- Reducir la presión arterial

Algunos compuestos de la tila, como la tilirosida, rutósido y ácido clorogénico, ayudan a reducir la tensión arterial alta. La tilirosida, por ejemplo, afecta a los canales de calcio del corazón, fundamentales en las contracciones musculares del mismo, por lo que puede reducir la hipertensión.

¿Tila por la noche?

Las infusiones de tila se han usado desde hace siglos para relajarnos antes de dormir y favorecer el sueño. Algunos de sus ingredientes tienen propiedades sedantes, por lo que calma la mente, ayudándonos a conciliar el sueño.

Cuando estamos preocupados o nerviosos no paramos de darle vueltas a la cabeza, lo que impide el estado de relajación que necesita la mente para conciliar el sueño, una infusión de tila antes de dormir nos calma y evita el insomnio.

¿Puede ayudarnos la tila a vivir más?

Ya hemos visto que la tila, tanto en infusión como extracto, aporta muchos beneficios a nuestra salud, especialmente en lo que se refiere a sus propiedades calmantes y relajantes. La ansiedad y el estrés crónico aumentan el riesgo de padecer muchas enfermedades crónicas graves como las del corazón, el cáncer o la obesidad, por lo que cualquier ayuda a evitar estos estados es positiva para nuestra longevidad.

Por otra parte, la tila contiene una gran cantidad de antioxidantes, sustancias esenciales para combatir los radicales libres que causan estrés oxidativo y aceleran el envejecimiento en nuestro organismo.

Por lo tanto, consumir tila de manera regular puede ayudarnos a evitar la inflamación y los daños celulares, aumentando nuestra esperanza de vida.

Efectos secundarios de la tila e interacciones

Una ingesta moderada, es decir, entre 2 a 4 gramos de mezcla de té al día, es segura. Sin embargo, una dosis excesiva puede causar diversos trastornos como náuseas, taquicardias o pesadez.

Además, las personas alérgicas a alguno de sus componentes o al polen pueden sufrir una reacción alérgica al tomarla.

Por otra parte, no se aconseja en mujeres embarazadas o lactantes, ni en niños, ya que no se ha comprobado su seguridad.

El uso a largo plazo está relacionado con enfermedades del corazón, por lo que no se aconseja en personas con antecedentes de problemas cardiacos.

Puede interactuar con medicamentos que contienen litio ya que las infusiones de tilo pueden alterar la forma en que el organismo excreta este elemento, lo que puede ser grave. Por eso mismo, no se aconseja tomarlo junto con otros diuréticos ya que podría causar deshidratación.

Tampoco si se están tomando anticoagulantes o si se padecen obstrucciones biliares.

Por último, su contenido en mucílagos disminuye la absorción de los principios activos de algunos medicamentos, reduciendo así su efecto, por lo que se debe consultar antes con un profesional de medicina.

AgeSwitch Antienvejecimiento

Ideas clave

  • La tila o té de tilo es una infusión que se extrae de la flor del tilo, un árbol del género tilia originario de Europa, Asia y el norte de América.
  • Esta planta medicinal tiene muchas propiedades beneficiosas para la salud gracias a su contenido en diversas sustancias como limoneno, nerol, eugenol, quecertina, terpineol, alfa-pineno, ácido cafeico, farnesol, glucósidos, taninos, cumarinas, carotenos, mucílagos, suercitrósidos y vitamina C.
  • Por eso, se le atribuyen propiedades calmantes, relajantes, antiespasmódicas, digestivas, diuréticas, anticoagulantes, somníferas y ansiolíticas.
  • Entre sus principales beneficios para la salud encontramos reducir la ansiedad y el estrés, combatir la inflamación, reducir el dolor leve, propiedades diuréticas, tratar resfriados, mejorar las digestiones, reducir la presión arterial.
  • Además, algunos de sus ingredientes tienen propiedades sedantes, por lo que calma la mente, ayudándonos a conciliar el sueño.
  • Ya hemos visto que la tila, tanto en infusión como extracto, aporta muchos beneficios a nuestra salud, especialmente en lo que se refiere a sus propiedades calmantes y relajantes. La ansiedad y el estrés crónico aumentan el riesgo de padecer muchas enfermedades crónicas graves como las del corazón, el cáncer o la obesidad, por lo que cualquier ayuda a evitar estos estados es positiva para nuestra longevidad.
  • Por otra parte, la tila contiene una gran cantidad de antioxidantes, sustancias esenciales para combatir los radicales libres que causan estrés oxidativo y aceleran el envejecimiento en nuestro organismo.
  • Una ingesta moderada, es decir, entre 2 a 4 gramos de mezcla de té al día, es secura. Sin embargo, una dosis excesiva puede causar diversos trastornos como náuseas, taquicardias o pesadez.

Enfermedades relacionadas

Fuente:

  • Allio A, Calorio C, Franchino C, Gavello D, Carbone E, Marcantoni A. Bud extracts from Tilia tomentosa Moench inhibit hippocampal neuronal firing through GABAA and benzodiazepine receptors activation. J Ethnopharmacol. 2015 Aug 22;172:288-96. doi: 10.1016/j.jep.2015.06.016. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26144285/
 
  • Daniel M. Grochowski, Marcello Locatelli, Sebastian Granica, Francesco Cacciagrano, Michał Tomczyk. A Review on the Dietary Flavonoid Tiliroside. omprehensive Reviews in Food Science and Food Safety. https://doi.org/10.1111/1541-4337.12389
 
  • Carullo G, Cappello AR, Frattaruolo L, Badolato M, Armentano B, Aiello F. Quercetin and derivatives: useful tools in inflammation and pain management. Future Med Chem. 2017 Jan;9(1):79-93. doi: 10.4155/fmc-2016-0186. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27995808/
 
  • Aguirre-Hernández E, Martínez AL, González-Trujano ME, Moreno J, Vibrans H, Soto-Hernández M. Pharmacological evaluation of the anxiolytic and sedative effects of Tilia americana L. var. mexicana in mice. J Ethnopharmacol. 2007 Jan 3;109(1):140-5. doi: 10.1016/j.jep.2006.07.017. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/16930893/

Redacción: Irene García

Supervisión editorial: Tomás Duraj

×