¿Qué es la edad biológica y cómo se calcula?

¿Qué es la edad biológica y cómo se calcula?

A grandes rasgos, la edad biológica es la edad que parecen tener tus células en función de su condición actual. Es decir, es cómo de envejecidos estás tus órganos y tus células y, generalmente, no coincide con la edad cronológica, pudiendo ser mayor o menor según cuáles sean tus hábitos de vida. ¿Quieres saber cuál es tu edad biológica y si estás haciendo las cosas de manera adecuada para alargar tu esperanza de vida?

Índice

Diferencias entre edad cronológica y edad biológica

La edad cronológica es la edad que marca nuestro DNI, es decir, los años que han pasado desde la fecha de nuestro nacimiento. Esa edad es inamovible y no podemos hacer nada para cambiarla (salvo mentir, claro).

Sin embargo, la edad biológica no es fija y sí puede variar según nuestra genética y nuestro estilo de vida ya que es un concepto fisiológico que alude al envejecimiento y estado de todo nuestro organismo y sus diferentes partes. Es la edad de las células en comparación con unos patrones estándar de referencia creados a partir de la media de la población de esa misma edad cronológica. Por ejemplo, dos personas de 40 años de edad cronológica pueden tener una edad biológica muy diferente, siendo la de uno de 25 años y la del otro de 55, con todo lo que supone.

Y una curiosidad, existe una edad biológica general y una edad biológica de cada organismo ya que no todo nuestro cuerpo envejece de la misma forma. Así es, tu cerebro puede ser más joven que tu corazón, por ejemplo.

Conocer nuestra edad biológica nos permite determinar nuestra tasa acumulativa de envejecimiento, es decir, la edad biológica en relación con la edad cronológica, una medida del ritmo al que ha envejecido el cuerpo por cada año que hemos vivido. A medida que pasan los años, nuestras células progresan más o menos rápido de lo que se espera de nuestra edad cronológica.

Si los números coinciden, tu cuerpo está envejeciendo adecuadamente. Si tu edad biológica es menor que la edad real, tu cuerpo está envejeciendo más lentamente de lo normal, lo cual es muy positivo para tu esperanza de vida. Si es al revés, es posible que esta sea más corta de lo que esperabas.

¿Cómo se calcula la edad biológica?

Existen diferentes métodos para calcular la edad biológica. Por ejemplo, se puede calcular utilizando unas tablas que tienen en cuenta nuestro estado fisiológico de acuerdo a los resultados de una serie de pruebas médicas como la función inmunológica, la densidad ósea, pruebas de esfuerzo, la función respiratoria, la medición de altura, el lugar de residencia o la edad de fallecimiento de los padres.

La forma más sencilla es realizar un análisis de sangre ya que, cuando las células envejecen, los extremos de los cromosomas (telómeros) liberan una serie de proteínas en la sangre que sirven para determinar el grado de envejecimiento de las células de la persona. Si este análisis se repite meses después, se puede saber también a qué velocidad está envejeciendo.

También se puede tener en cuenta una serie de biomarcadores clave en el envejecimiento como la longitud de los telómeros o la metilación (un proceso químico capaz de desactivar la expresión de un gen bueno), gracias a los cuales se puede establecer un perfil epigenético para determinar la edad biológica de diferentes tejidos.

La metilación son las modificaciones epigenéticas o cambios químicos que ocurren en el código de ADN contenido dentro de las células a medida que envejecemos. Mayores cantidades de metilación interrumpen la función normal de la célula para que no pueda hacer el trabajo para el que fue diseñada de manera eficiente. Esta disminución de la eficiencia es la causa subyacente de lo que consideramos signos de envejecimiento: cambios en el color del cabello, aparición de arrugas, aumento del dolor en las articulaciones, etc.

Una forma de conocer esta metilación son los relojes epigenéticos, como el de Hovarth, uno de los primeros que se crearon. El estudio de Horvath utilizó 353 sitios en el genoma para predecir la edad cronológica, comparando los datos con los datos existentes sobre la edad cronológica. El reloj DNAmAge de Horvath predice la mortalidad por todas las causas y las morbilidades múltiples. Aunque actualmente existen relojes mucho más completos.

Recientemente, un nuevo estudio ha marcado los órganos y parámetros fundamentales que hay que tener en cuenta para medir la edad biológica de una persona:

- función cardiovascular y estado de las arterias.

- función pulmonar.

- función cerebral.

- elasticidad y firmeza de la piel.

- medición de la inmunosenescencia.

- longitud de los telómeros (a mayor envejecimiento, telómeros más cortos).

Este estudio se lleva a cabo en algunas clínicas privadas especializadas en anti-aging, pero no está al alcance de todos.

Por eso, una opción más barata y asequible es usar alguna de las múltiples calculadoras de edad biológica que existen en internet en las que se calcula esta edad teniendo en cuenta los hábitos de vida (edad, sexo, historial familiar de patologías, índice de masa corporal, índice de cintura, horas de sueño, tabaquismo, dieta, actividad física, trabajo, etc.). Si todavía no lo has hecho, prueba la calculadora de edad biológica de Actiage.

Otra forma de calcular la edad biológica es mediante herramientas que estudian marcadores epigenéticos, grupos químicos que marcan el ADN de una persona.

¿Cómo podemos retrasar nuestra edad biológica?

Retrasar nuestra edad biológica respecto a nuestra edad cronológica es fundamental para vivir más años ya que, a menor edad biológica, menor riesgo de enfermedades asociadas al envejecimiento como el cáncer, las enfermedades cardiovasculares, la diabetes tipo 2, la osteoporosis, la sarcopenia o el Alzheimer. Los factores genéticos solo determinan el 30% de nuestra edad biológica, el resto depende de factores exógenos marcados por nuestro estilo de vida, por lo que ser más o menos viejos en este aspecto depende sobre todo de nosotros.

Por eso, si queremos alargar nuestra vida debemos saber cómo retrasar nuestra edad biológica y mantenernos jóvenes más tiempo:

1- Seguir una dieta saludable y variada que nos ayude a mantener un peso corporal normal y a mantener una microbiota sana. Es importante consumir de manera regular antioxidantes que ayuden a luchar contra los radicales libres que aumentan la oxidación celular y el estrés oxidativo.

2- Hacernos análisis de sangre y controles periódicos para saber nuestro estado de salud en cada momento y detectar a tiempo posibles patologías graves.

3- Hacer ejercicio físico a diario. Se aconsejan 150 minutos de actividad aeróbica a la semana y 3 sesiones de entrenamiento/fuerza.

4- Dormir al menos 7 horas al día.

5- Nada de tabaco. Si fumas, déjalo ya mismo.

6- Evitar el estrés y cuidar nuestra salud mental.

7- Evitar la contaminación ambiental, la radiación y las toxinas ambientales.

8- Cultivar las relaciones personales.

9- Realizar ayuno intermitente o períodos regulares de restricción calórica para mejorar la autofagia, el proceso de limpieza de las células dañadas.

También te puede interesar

Tratamiento Antienvejecimiento

Echa un vistazo al tratamiento de Antienvejecimiento. Analizamos tu salud con analíticas avanzadas y un sensor metabólico para ayudarte a adquirir los hábitos precisos para vivir más..

Ver tratamiento Calculadora de Esperanza de Vida

Ideas clave

  • La edad cronológica es la edad que marca nuestro DNI, es decir, los años que han pasado desde la fecha de nuestro nacimiento.
  • Mientras que la edad biológica es concepto fisiológico que alude al envejecimiento y estado de todo nuestro organismo y sus diferentes partes. Es la edad de las células en comparación con unos patrones estándar de referencia creados a partir de la media de la población de esa misma edad cronológica.
  • Conocer nuestra edad biológica nos permite determinar nuestra tasa acumulativa de envejecimiento, es decir, la edad biológica en relación con la edad cronológica, una medida del ritmo al que ha envejecido el cuerpo por cada año que hemos vivido y la esperanza de vida que tenemos.
  • Existen diferentes métodos para calcular la edad biológica. Por ejemplo, se puede calcular utilizando unas tablas que tienen en cuenta nuestro estado fisiológico de acuerdo a los resultados de una serie de pruebas médicas.
  • La forma más sencilla es realizar un análisis de sangre ya que, cuando las células envejecen, los extremos de los cromosomas (telómeros) liberan una serie de proteínas en la sangre que sirven para determinar el grado de envejecimiento de las células de la persona.
  • También se puede tener en cuenta una serie de biomarcadores clave en el envejecimiento como la longitud de los telómeros o la metilación. Una forma de conocer esta metilación son los relojes epigenéticos, como el de Hovarth, uno de los primeros que se crearon.
  • Una opción más barata y asequible es usar alguna de las múltiples calculadores de edad biológica que existen en internet en las que se calcula esta edad teniendo en cuenta los hábitos de vida (edad, sexo, historial familiar de patologías, índice de masa corporal, índice de cintura, horas de sueño, tabaquismo, dieta, actividad física, trabajo, etc.).
  • Para retrasar nuestra edad biológica debemos seguir una dieta sana, hacernos revisiones médicas periódicas, dormir al menos 7 horas, hacer ejercicio físico regular, evitar el estrés y la contaminación, cuidar las relaciones sociales y realizar ayuno intermitente.

Enfermedades relacionadas

Fuente:

  • Collerton J, et. al. (2007). The Newcastle 85+ study: Biological, clinical and psychosocial factors associated with healthy ageing: Study protocol. DOI: 10.1186/1471-2318-7-14
 

Redacción: Irene García

Supervisión editorial: Tomás Duraj

×